Afrontando desafíos: Enfermería Adaptativa en el cuidado de un paciente con Síndrome de Prune Belly

Resumen

Este artículo analiza la aplicación del Modelo de Adaptación de Sor Callista Roy en la atención de un paciente pediátrico con Síndrome de Prune Belly. Según este modelo, el paciente es un sistema adaptativo que responde a estímulos internos y externos mediante mecanismos de afrontamiento. La enfermería, clave en este proceso, debe garantizar cuidados integrales que preserven la salud, evaluando las respuestas fisiológicas, el autoconcepto, el desempeño de roles y la interdependencia (1,2).

En el caso del Síndrome de Prune Belly, los cuidados de enfermería se enfocan en mejorar la función respiratoria y renal, manejar el dolor, optimizar la nutrición y proporcionar apoyo psicológico al paciente y su familia. La intervención comienza con una valoración exhaustiva de las necesidades del paciente, identificando factores de estrés y recursos de afrontamiento. Este enfoque promueve la calidad de vida del paciente y empodera a la familia para participar activamente en el cuidado.

Las estrategias implementadas incluyen ejercicios físicos para fortalecer el tono muscular y la asistencia en el manejo de dispositivos médicos. Así, el Modelo de Adaptación de Roy ofrece un marco integral para abordar casos complejos como el del Síndrome de Prune Belly, guiando a la enfermería hacia prácticas basadas en la adaptación y el bienestar.